Lo que Tamar Berk nos ofrece con esta canción es un viaje en
el tiempo, tanto por su melodía por la letra que acompaña a esta canción. Y es
que desde los primeros segundos de este tema podemos notar ese sentimiento de
nostalgia, además de que su sonido es tranquilo, calmado, pega muy bien con el
indie rock que se hacía en el 2005, justo la época a la que hace referencia en
este tema y el momento que busca homenajear.
En su letra, la cual se siente muy personal e íntima, Tamar
nos muestra un tono melódico tranquilo y melancólico, incluso dulce en medio de
las notas graves que logra alcanzar en algunos versos. En esta canción, nos
habla sobre el “sueño americano” desmoronado, al tiempo que nos cuenta cómo fue
iniciar una banda solo para pasar el tiempo, incluso nos explica como en aquellos
tiempos parecía que todo mundo formaba parte de una banda. Esta canción pega
justo en la nostalgia.
¡Un tema que nos recuerda cómo era la escena DIY en el 2005!
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