Esta canción nos transporta a otra época del rock con su
sonido, es actual, pero en el sonido de su música vive el espíritu del rock clásico.
Podemos escuchar una armónica que dota de un tono más brillante a la guitarra,
la cual arranca como un elemento melódico que poco a poco va adquiriendo
fuerza, luego tenemos la batería, ella va en un tono más tranquilo, pero logra
acoplarse a la perfección al resto de los instrumentos. Lo que llama la
atención en este tema es la interpretación.
En el puente del minuto 2:10 la voz se queda solo con la
armónica, ahí es donde adquiere un tono más susurrante, pero el resto de la
canción va en un tono más grave y solo un poco rasposo, pero quien canta no
pierde el ánimo en ningún momento de la interpretación, cada uno de los
instrumentos se acopla a su canto, y él, sin duda, es quien logra transmitir
este espíritu del rock clásico.
¡Este tema suena como un buen rock clásico!

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