Todo el estilo del indie rock vive en esta canción. En una
primera escucha te va a sonar como a bandas del estilo Franz Ferdinand o The Kooks,
porque esta banda tiene un sonido que brilla, y en donde cada uno de sus
elementos se destaca por su sonido animado y constante. En este sentido,
destacó el uso de la batería con la agilidad con la que se toca en el coro,
para luego ofrecer un tono más relajado y constante en el resto de los versos.
Luego, tenemos una guitarra que parece brillar en cada nota que sale de sus
cuerdas.
Pero, sin duda, es la interpretación la que quiero destacar,
porque es el corazón de la canción, es el espíritu de la banda y justo, es la
que mantiene vivo la esencia del indie rock contemporáneo. Tenemos un tono
ligeramente grave, pero cada verso que interpreta lo hace con una entonación
distinta, incluso cerca del minuto 2:55 dan algunas notas en tu tono gutural
que logra conquistar a nuestro oído.
¡El alma y el espíritu del indie rock viven en este tema!
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