La melodía en esta canción se siente como la de un rock
alternativo tranquilo de inicios de los 2000, y es que también va muy bien
combinado con la interpretación grave de su vocalista. La canción se mueve con
una melodía que va de menos a más, comienza ligeramente tranquila, pero poco a
poco nos va metiendo en un ambiente cargado de una guitarra poderosa y una
batería que va marcando este ritmo energético. Cerca del minuto 1:35 la música
recupera este tono ligero, pero que se siente igual de denso que al inicio.
Sobre la interpretación, lo que logra llamar la atención es
ese tono sonoro grave, pero en su interpretación hay mucho sentimiento
involucrado, porque incluso se pueden percibir esas notas de dolor o nostalgia
cuando se llegan momentos como el coro. El tema logra conjugar cada uno de sus
elementos y crea una canción que, a pesar de conservar elementos de inicios del
2000, logra sentirse actual.
¡Este es el rock melódico que necesitas para tu tarde!
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