Un ritmo que te
hace bailar eufóricamente hasta perder la compostura
Indudablemente perderás la
compostura al bailar este ritmo porque si no es de esa manera, no se disfruta
igual, tienes que sentir la música, dejar que impacte tus sentidos hasta
hacerlos vibrar de adrenalina de esa que te hace temblar de euforia, de
cansancio, hasta que no queda mas aliento en ti. Es un ritmo tan evolvente que
se vuelve imposible permanecer estático o indiferente ante tal interpretación
acelerada que fluye de tal forma, que pareciera que nadie la alcanza. Tiene una
sincronización instrumental que surge de guitarras prendidas, así como
platillos efusivos y hasta una trompeta que le da un plus a la pieza.
No tiene grandes cargas de intensidad, pero sí, mucha energía, así como dinamismo que transmite a todo aquel que lo escucha; lo que si se percibe es una disminución tanto de volumen, ritmo e intensidad a partir del minuto 01:54 durante algunos segundos en donde permanece solo la voz para posteriormente recaer en un verso retomando el ritmo previo que venía sonando. No dejes de escuchar este timbre fresco que entona con mucho entusiasmo, alegría, pero sobre todo con emoción.
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